Cuando observamos la naturaleza y su majestuosidad, no podemos más que admirar ¡Cuán Grande es nuestro Creador!

Es imposible enumerar cada una de la criaturas que habitan en la tierra, desde lo más pequeño hasta lo más grande; particularmente me llamaban la atención las mariposas y al crecer mi hija me ha enseñado a mirarlas con otros ojos y así he profundizado en conocer sobre su metamorfosis, donde seguro que he aprendido que todo ocurre en el tiempo indicado, no es antes ni mucho menos después.

Entre los otros animales que me llaman poderosamente la atención se encuentra el Águila, ya que su majestuosidad nos lleva a contemplar sus virtudes y también debilidades, pero que en cada etapa encierra una gran enseñanza.

Las Águilas poseen entre sus virtudes una Visión muy aguda lo que le permite visualizar su objetivo desde las Alturas, existen algunas especies que poseen 2 puntos focales para no perder nada que pueda estar a su alcance, además tiene la capacidad de remontar a las Alturas, alcanzando una velocidad entre 120 a 160 km/h, lo que logra desarrollar con mayor facilidad cuando desciende en busca de su objetivo. Si podemos citar su agilidad, es sorprendente como pueden levantar mayor peso de lo que ellas tienen en su contextura. Pero viendo sus virtudes, es necesario que para mantenerlas debe reconocer sus debilidades y a la mitad de su vida, se remontan a lo más alto de una cima y pierde todas esas cualidades que le llevan a destacarse entre agilidad, destreza, velocidad, majestuosidad, poder, fuerza; recibiendo una RENOVACIÓN de sus garras, pico, plumaje; podemos compararla con una “metamorfosis” sufrida directamente por la necesidad de vivir ya que si la misma no ocurre, el ave puede morir.

A través de las sagradas escrituras en el libro de Isaías en el capítulo 40, nos lleva a una cita que es propicia para destacar la renovación que alcanzan las Águilas. “31 pero los que esperan a Jehová tendrán nuevas fuerzas;levantarán alas como las águilas; correrán, y no se cansarán; caminarán, y no se fatigarán.

Hoy vemos el Águila con sus virtudes, pero llega el día en que vemos la misma Águila con sus debilidades; es imposible que sea renovada, si no reconoce que debe ir a lo alto de la cima.
En esta oportunidad podemos enmarcar que únicamente: En las Alturas están sus Fuerzas, ya que es imposible levantar las alas cuando se encuentra en tierra, es muy importante reconocer que nuestro socorro viene de lo Alto.

Las Águilas reciben su renovación en la Cima, alcanzan mayor velocidad cuando vienen de las Alturas, tienen Agilidad en el aire.

Al meditar en sus virtudes es impresionante ver que cuando nos encontramos con las situaciones del día a día “las fuerzas se debilitan”, las plumas, garras y pico, no son los mismos; pero que vivificante se vuelve el camino cuando en la mitad de la vida, llamemos a éste momento “mitad de las situaciones”, donde se renueva la visión, agilidad, destreza, velocidad, fuerza y poder es únicamente cuando estamos en la cima donde Dios se encarga de hacer la renovación del águila y la metamorfosis de la mariposa con aquella situación en la que reconocemos que las virtudes han desaparecido. Es necesario llevar nuestra mirada a los cielos y ante toda situación reconocer que únicamente En las Alturas está la renovación de nuestras Fuerzas.

By Kathia Camarena Mendoza